Todos experimentamos en alguna ocasión, la frustración de que nuestro bizcocho no salga como esperamos. Cuando por fin vemos el resultado final, dista mucho de la apetitosa foto prometedora que aparecía en el libro de cocina, vídeo de youtube, o inspiración de turno…
Pues bien, como sabéis ¡la información es poder! Así que si queréis olvidaros de que vuestros bizcochos resulten algo secos, quemados por fuera, crudos por dentro, apelmazados, poco sabrosos…etc, etc, etc,…En Tábatha Pastelería te damos todas las claves para que evites esos errores que boicotean el resultado de un bizcocho perfecto.
¿Quieres saber cuáles son? No te pierdas este post!
¿Por qué tu bizcocho no sale perfecto? En la proporcionalidad está la virtud
A continuación te detallamos los posibles resultados «no deseados» a la hora de elaborar tu bizcocho y te contamos cuáles han sido los posibles errores que lo han originado. Temperaturas en exceso o en defecto, medidas no proporcionadas de harina o de levadura, moldes equivocados o en mal estado, no calcular bien los tiempos de cocción, no respetar el proceso de enfriado… Son algunos de los descuidos más comunes a la hora de elaborar nuestros bizcochos.
Se hunde en el centro
Uno de los problemas más comunes, es que nuestro bizcocho no se haya hecho bien y esté hundido en la zona del centro. En ese caso, el problema puede deberse a lo siguiente.
- Que la temperatura del horno no fuera lo suficientemente alta para cocerlo.
- Que nuestro bizcocho tenga un exceso de grasa y al pesar más de lo normal, le cueste más trabajo subir.
- Hemos abierto el horno antes de tiempo y ha habido una pérdida fuerte de temperatura lo que origina que la levadura deje de actuar y se quede justo en el centro.
- En repostería el tamaño sí importa y es que si el tamaño del molde versus la temperatura adecuada, puede hacer que nuestro bizcocho baje en su centro.
- Desproporcionalidad entre relación de harina, líquidos y levadura. La levadura no tiene la suficiente fuerza como para mantener el peso.
El bizcocho nos ha salido con una forma irregular
Si nuestro bizcocho ha crecido de forma irregular esto puede deberse a dos motivos.
- Que la masa tenga un exceso de harina
- Que lo hayamos horneado a una temperatura demasiado alta. Recuerda que esta, ha de ser constante durante toda la cocción. Por eso es importante precalentar el horno antes de meter nuestro bizcocho y no oscilar con las temperaturas arriba-abajo para compensar.
- Nos hemos equivocado a la hora de elegir el molde y este es demasiado pequeño.
El bizcocho queda abierto o con grietas
Un bizcocho abierto, estéticamente no es lo más deseado, pero además de eso, puede originar que al desmoldarlo termine por romperse. ¿Por qué se nos ha agrietado el bizcocho? Puede deberse a los siguientes motivos:
- Una temperatura de cocción muy elevada hace que la levadura suba más rápido y sin apenas darle tiempo a nuestro bizcocho para que se forme la miga. Eso provoca estas «roturas» o grietas que estropean nuestra elaboración.
- Nos hemos pasado con el tiempo de horneado. Nuestro bizcocho puede resquebrajarse si no somos minuciosos con los tiempos. Ni antes ni después. Hay que sacar el bizcocho en el momento justo.
Nuestro bizcocho se pega al molde
Parece que tu bizcocho ha salido perfecto, tan solo tienes que desmoldarlo y emplatarlo para su presentación..Pero..¡ojo! te está costando más de la cuenta y ves como tu creación poco a poco se está desquebrajando! Tu bizcocho se ha pegado al molde. Esto puede deberse a dos motivos:
- El molde está en mal estado y no mantiene sus cualidades antiadherentes.
- No lo hemos engrasado de forma adecuada. Utilizar papel de horno y forrar tu molde con él para que no se nos pegue, es una opción. También podemos engrasarlo con mantequilla derretida y con la ayuda de un pincel de silicona.
Nos ha quedado apelmazado
Cuando batimos demasiado los ingredientes, es decir que nos excedemos en el batido, al hornearlo queda apelmazado.
¡Si tienes cualquier duda no dudes en contactar con nosotros! ¡¡Te esperamos!!